“ABANDONAR” на російській мові

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Antes de abandonar la pensión y de que el bastón pudiera serle arrebatado, destrozó el espejo del lavabo y otro que pendía en el descansillo de la escalera.

Tan pronto como Linda volvió la espalda, Cristina cogió el reloj de la joven, que había tenido que abandonar forzosamente para meterse en el agua, y lo retrasó hasta que marcó la hora verdadera.

No resultaba extraсo, por tanto, que incluso Sebastián, el más escéptico de los miembros de la familia «Maradentro», se viera obligado a aceptar, aunque a regaсadientes, la tesis de Yaiza de que el espíritu del abuelo se negaba a abandonar la goleta a la que había dedicado una parte tan importante de su vida.

”New York Times Books Review* * *Stanisław LemINTRODUCCIÓNNÁPOLES-ROMAROMA-PARÍSPARÍS (ORLY-GARGES-ORLY)SOBRE STANISŁAW LEMCRÉDITOS* * *Stanisław LemLA FIEBRE DEL HENOTraducción del polaco a cargo dePilar Giralt y Jadwiga MaurizioINTRODUCCIÓNSegún cuenta Stanisław Lem en su autobiografía, en el año 1946 su familia se vio obligada a abandonar Lvov y a mudarse a Cracovia.

Kitiara y él se preparaban para abandonar el escondrijo del dragón, una zona de frondosos bosques alejada de las murallas de Palanthas.

¡Pues a cagar más lejos… ¡Como tienen el culo muy grande y no usan papel, necesitan mucha agua para lavarse…Y por último acudieron una maсana muy temprano los delfines y no eran los mismos, no podían serlo, porque aquéllos se habían quedado sin duda cerca de Lanzarote y de sus costas, y a Yaiza se le antojaba que ni siquiera a un delfín se le ocurriría la idea de abandonar voluntariamente las costas de su isla.

El sábado a las ocho de la mañana el Mount Castle deberá abandonar el puerto.

•Pedro «el Triste» se enteró en la taberna de Tinajo de que los «Maradentro» habían tenido que abandonar la isla a causa de la persecución a que les sometieran los hombres de don Matías Quintero, y que dado lo cochambroso del falucho en que habían embarcado lo más probable era que estuvieran sirviendo ya de pasto a los tiburones del Atlántico.

Por un instante, Falcó pensó en abandonar.

¿Hubo pistas muy prometedoras que consideró preciso abandonar?

La belleza de la mañana, no obstante, le tentó a abandonar el hotel más temprano que de ordinario.